CONSEJOS


Consejería de Educación.
Delegación Provincial de Córdoba.
Equipo de Orientación Educativo de Palma del Río.



LAS TAREAS ESCOLARES


Apoyar sistemáticamente la realización de las tareas escolares por la familia ayuda a tener éxito en el aprendizaje.

La escuela necesita de la colaboración y el apoyo de las familias. Interesarse por el trabajo escolar y ayudar de forma adecuada a que los/as niños/as afronten la tarea escolar de forma responsable contribuye de manera eficaz en su educación.
Las tareas escolares son muy importantes, ayudan a desarrollar hábitos y técnicas de estudio, les ayudan a organizarse y planificar, desarrollan su independencia y responsabilidad para afrontar su trabajo.
La mejor motivación para el alumnado proviene del interés que la familia muestra por el aprendizaje escolar. Este interés hace que los niños valoren la importancia que tiene el aprendizaje escolar y les enseñe que es una tarea que, aunque dificultosa a veces, merece la pena.
De todas las tareas, la lectura diaria en casa es fundamental. Se debe desarrollar el hábito y el interés de la lectura como medio de aprendizaje y como forma de disfrute y entretenimiento.

¿Para qué se ponen tareas para casa?


▪ Para repasar y consolidar los aprendizajes.
▪ Para dar más tiempo y que puedan terminar trabajos que se consideren fundamentales.
▪ Para preparar las clases del día siguiente.
▪ Para que poco a poco aprendan a trabajar de forma independiente.
▪ Para que aprendan a ser responsables y disciplinados.
▪ Para crear hábitos de lectura y estudio.
▪ Para desarrollar hábitos de investigación y trabajo en equipo.
CÓMO AYUDAR

SU INTERÉS ES FUNDAMENTAL


El interés de la familia por las tareas es la mejor forma de motivación para el/a niño/a y podemos manifestarlo:
▪ Hablando todos los días con el/a niño/a sobre el colegio, mostrando interés, preocupación y valorando lo que hace.
▪ Animándole a utilizar sus aprendizajes en actividades cotidianas.
▪ Dando buen ejemplo en temas tan importantes como la lectura. Cuando son pequeños leer libros de forma conjunta es muy motivador.
▪ Ayudándole a buscar información sobre sus trabajos o temas que le interesen.
▪ Hablando con los maestros y mostrando satisfacción sobre lo positivo.

EL LUGAR DE ESTUDIO

▪ Procurar que tenga un lugar propio de estudio, bien iluminado, tranquilo y sin ruidos.

▪ Conviene que tenga su mesa o escritorio y una estantería para tener todo lo necesario ordenado y a mano para evitar “paseos” y distracciones.
▪ A veces esto no es posible, si tiene que estudias en la cocina o en el salón procurar apagar la TV y evitar el ruido y otras fuentes de distracción.
▪ Si tiene su cuarto de estudio puede decorarlo s su gusto, pero procurando evitar la decoración excesiva y la que le distraiga.
▪ No es buena idea que el cuarto de estudio tenga TV, equipo de música, juegos,… Si dispone de ordenador, durante las horas de estudio, sólo debe utilizarlo para actividades relacionadas con la tarea.
FIJAR UN HORARIO PARA HACER LAS TAREAS

▪ Hay que ayudar al niño/a a tener un horario fijo para hacer sus tareas. Al principio debemos controlar y animar a que lo cumpla, poco a poco se convertirá en un hábito y podrá seguir su horario con mayor independencia.

▪ El horario deberá estar escrito y en lugar visible en su cuarto de estudio.
▪ Para aquel alumnado menos motivado, conviene dejar un rato de descanso después de comer y realizar el horario de estudio antes de otras actividades que le gusten más. A veces habrá que condicionar el trabajo bien hecho al tiempo de ocio.
CREAR BUENOS HÁBITOS DE ESTUDIO

▪ Ayudarle a organizarse y a aprovechar bien el tiempo de estudio.

▪ Enseñarle cómo y dónde puede consultar las dudas que les surjan.
▪ Ayudarle a preparar los controles.
▪ Estimular el hábito de ir estudiando poco a poco todos los días y evitar dejar las tareas para última hora.
▪ Acostumbrarlo a realizar pequeños descansos mientras estudia o realiza las tareas (5 minutos cada media hora)
▪ Animarlo a enfrentarse a las dificultades y frustraciones.
▪ Elogiar siempre su esfuerzo y sus avances por pequeños que nos parezcan.

MIRAR LA TAREA REALIZADA
▪ Revisar las tareas diariamente.

▪ Dejar claro que la responsabilidad de la realización de las tareas es del niño/a.
▪ Ayudar cuando realmente sea necesario. La ayuda innecesaria y constante hace a los niños dependientes del adultos, pueden acomodarse y dejar tareas del colegio para casa porque allí tienen quien le hace su trabajo.
▪ Responsabilizarlos de la organización y cuidado de sus materiales de trabajo, incluida la preparación de la mochila para el día siguiente.
AYUDAR A CONCENTRARSE

▪ Eliminar las distracciones.
▪ Controlar el uso del teléfono durante el tiempo de estudio.
▪ Antes de sentarse a estudiar, preparar todo lo necesario.
▪ Aprovechar bien el tiempo. Las tareas deben realizarse bien y en el menor tiempo posible.

MANTENER CONTACTO CON EL MAESTRO

▪ Trabajar de forma coordinada con el maestro.

▪ Hablar con él cuando detecte el menor problema o surja cualquier tipo de duda.
▪ Intercambiar información relevante entre el colegio y la familia en un clima de confianza, con la seguridad de que todos quieren conseguir la mejor formación del alumno.
▪ Formalizar acuerdos de colaboración si es necesario y realizar un seguimiento para valorar los resultados.